Las claves de la depilación con cera

¿Estás pensando en la depilación con cera? ¿Quieres saber qué tipo es la más adecuada para ti? Pues vamos con algunos consejos que te serán de utilidad.

Para comenzar es necesario que conozcamos cómo crece nuestro vello ya que éste pasa por diferentes ciclos que se llaman fases anágena, catágena y telógena.

• La fase anágena es la fase de crecimiento y diferenciación del folículo y de fabricación de tallo piloso.
• La fase catágena. Al finalizar la fase de crecimiento, comienza la fase de transición, que dura solamente unas pocas semanas. La división celular se reduce, y la raíz se encoge hasta ocupar un tercio de su tamaño original.
• La fase telógena es la fase de reposo, dura aproximadamente entre tres a cuatro meses y es el periodo durante el cual cae el vello, tanto por sí solo como a consecuencia del empuje que ejerce el nuevo cabello en crecimiento, para que pueda comenzar un nuevo ciclo de crecimiento.

La depilación con cera

La depilación con cera requiere de una técnica muy específica para evitar que se produzcan lesiones en la piel o que algún pelo quede bajo la piel, creciendo hacia dentro y produciendo una infección.

No es aconsejable utilizar cremas antes de la depilación, pero tampoco realizarla con la piel muy seca porque el pelo se puede partir y no conseguiremos un resultado adecuado.

¿Cuál es la más apropiada?

Hoy en día las ceras mas utilizadas son la cera en roll-on, cera tibia o cera caliente, ésta última para zonas más sensibles como ingles y axilas. La cera fría no se suele utilizar en salones de belleza y no debemos confundir ésta con la tibia.
La cera tibia funde a unos 35 grados, se extiende con el roll-on y se retira con bandas de celulosa. También existe en formato de paleta y se retira de la misma manera resultando bastante higiénica ya que se desecha por completo.
La cera caliente funde a unos 42 grados como máximo. La mayoría de las ceras en la actualidad son de baja fusión, por ello se debe desechar la cera utilizada, porque al fundir a tan poca temperatura no es suficiente para eliminar los gérmenes y bacterias que están en nuestra piel. Ni que decir si en la zona que hemos depilado el poro sangra.

A la hora de elegir con qué cera debemos depilarnos nos centraremos en nuestra piel. Si tenemos varices muy pronunciadas, mala circulación o diabetes no es recomendable utilizar ceras calientes. La cera tibia es recomendable para casi todos los tipos de piel, excepto descamaciones o dermatitis, pero en ese caso es preferible esperar a que desaparezca el problema.

Consejos post-depilación

El ciclo del pelo dura unos 20 días, con lo cual al cabo de tres semanas se recomienda repetir el proceso, pero si nos depilamos con cera de forma frecuente sin pasarnos cuchillas ni cremas, lograremos debilitar el vello alargando estos plazos.
Es muy importante calmar la piel después de depilarse. Al retirar la cera estamos realizando un peeling y la piel necesita ser calmada, así que una buena hidratante después nos irá fenomenal.
Además os recomiendo aplicar una crema que lleve la ampolla inhibidora del vello, y no lavar la zona hasta que no pasen un mínimo de 2 a 3 horas que permitan al producto realizar el efecto.

Conviene hidratar mucho la piel los días siguientes a la cera pues cuanto mas elástica y flexible tengamos la piel, el vello podrá salir con más facilidad y así no se formarán los incómodos granitos conocidos como forúnculos que nos causan esas incómodas manchas y rojeces.
¡Cuidado si después de la depilación vais a estar al sol! No se recomienda ni estar en contacto con el sol ni arena de playa ni piscinas, podríamos dañar seriamente la piel.

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