Existen muchos tipos de rutina de skincare, pero ¿realmente la tuya beneficia tu piel?
En nuestra masterclass podrás aprender en tan sólo 5 minutos qué productos utilizar para tu tipo de piel, y cómo aplicarlos para obtener los mejores resultados.
1. ¿POR QUÉ ES CLAVE TENER UNA RUTINA DE SKINCARE?
Tener una rutina de skincare es esencial, ya que una piel bonita no solo depende de la genética, sino de la constancia y de hacer las elecciones adecuadas. No es necesario gastar mucho dinero ni pasar muchas horas haciendo tratamientos de belleza; lo más importante es ser constante con una rutina simple. El enfoque debe estar en lo básico: limpiar la piel mañana y noche, aunque a veces cueste. Esto es fundamental para mantenerla sana y libre de imperfecciones. Además, nunca hay que olvidar la hidratación, incluso si tienes piel grasa.
Antes de aplicar tu crema, puedes utilizar un sérum. Este paso es esencial para conseguir un brillo natural en tu rostro.
2. LOS CLÁSICOS NUNCA PASAN DE MODA
En este caso, las cremas con péptidos, como la Crema Peptides Eveline Antiarrugas de Eveline, son un clásico que sigue siendo muy eficaz. Los péptidos son cadenas de aminoácidos que ayudan a regenerar y reparar la piel, y siguen siendo uno de los ingredientes más valorados por los expertos. Apuesta por productos básicos y aprende a sacarles el máximo provecho para cuidar tu piel.
3. ¿QUÉ FACTORES CONSIDERAR A LA HORA DE ESCOGER UNA CREMA HIDRATANTE PARA TU RUTINA DE SKINCARE?
- Determina cual es tu tipo de piel: aunque tengas la piel grasa, también tienes que hidratarla. Opta por una fórmula ligera, como aquellas que contienen Ácido Azeláico, Niacinamida y Betaína, que purifican, controlan el exceso de sebo, reducen el acné y matifican la piel, respetando su barrera natural. Si tienes piel seca, elige una crema más rica y nutritiva. También es importante considerar si tu piel es sensible o más resistente, y si buscas objetivos específicos, como reducir manchas o mejorar la firmeza.
- Fíjate en los ingredientes de la crema que selecciones: busca hidratantes como ácido hialurónico, o antioxidantes vitales como las vitaminas C y E. Y si tienes piel sensible, elige productos sin fragancias ni alcohol. Si es para hacer uso durante el día, no olvides escoger una crema hidratante con SPF para protegerte del sol.
- La textura también juega un papel importante: si prefieres una sensación fresca y ligera, opta por productos en versión sérum. Para una nutrición más profunda, elige cremas más densas. Y si tienes preocupaciones específicas, como arrugas o manchas, selecciona productos con ingredientes que las aborden, como retinol o antioxidantes.
4. ¿REALMENTE ES NECESARIO TENER PRODUCTOS DE DÍA Y OTROS PARA LA NOCHE?
¡La verdad es que sí! Esta información no es producto del marketing con el objetivo de que consumamos más. Durante el día, lo más importante es hidratar la piel y protegerla de la contaminación, el clima y, sobre todo, los rayos UV. La exposición al sol y a la polución pueden causar numerosos daños en la piel. Por eso, es esencial aplicar protector solar y productos que ayuden a fortalecer la barrera cutánea.
Por otro lado, durante la noche, la piel entra en un proceso de reparación natural. Mientras dormimos, la piel se repara y regenera, estimulando la producción de colágeno y elastina, lo que mejora su firmeza y elasticidad. Además, la circulación sanguínea se activa, favoreciendo la renovación celular. Por eso, los productos de noche suelen ser más nutritivos y reparadores, aprovechando este proceso natural de regeneración.
Así que, más allá de una estrategia de marketing, la rutina de skincare debe de diferenciarse entre productos de día y de noche.
5. Una vez seleccionados los productos, es importante saber la forma correcta de aplicarlos.
- No tengas prisa: asegúrate de que el tratamiento que usas habitualmente, como el sérum, se haya absorbido completamente antes de aplicar la crema. Recuerda siempre limpiar previamente tu rostro con un limpiador adecuando a tu tipo de piel.
- Menos es más: usa la cantidad adecuada de crema, equivalente al tamaño de una almendra. Si aplicas demasiado, puedes reducir su eficacia y penetración, ya que la piel tiene un límite de absorción. Además ¡así la crema te durará más tiempo! Son todo ventajas…
- El último paso: realiza un buen masaje al aplicar el producto en el rostro. Esto no solo activa la circulación y relaja los músculos faciales, sino que también mejora la absorción del producto.
Si has llegado hasta este punto, ¡felicidades! Ahora cuentas con todo lo necesario para convertirte en la estudiante destacada de esta clase de rutina de skincare exprés. Sólo queda poner en práctica lo aprendido para lograr una piel más hidratada, renovada y firme. Únicamente necesitarás tus notas y los productos de Mazuelas.
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